Adquirir un seguro de vida
¿Has escuchado hablar sobre los seguros de vida? Si es así, probablemente quieras conocer cuándo conviene adquirir un seguro de vida con exactitud. Pues bien, aunque muchas personas solo miran el precio de la prima, también debemos detenernos un momento y evaluar cuáles son todos los beneficios que esta ofrece y, de igual forma, determinar cuándo es el momento indicado para comprar dicha póliza.
Alguno expertos mencionan que el seguro de vida solo debe adquirirse cuando se está en una edad avanzada y se tiene una familia numerosa. Todo ello con el fin de que, cuando el titular de la póliza fallezca, la compañía de seguros indemnice a la familia por ello, de forma que la familia no quede desamparada monetariamente.
Sin embargo, no siempre esto es así. Al contrario, hay momentos en los que comprar una póliza de vida puede ayudar a mejorar la estabilidad financiera a largo plazo.
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Cuándo conviene comprar una póliza de vida
En resumen, se necesita un seguro de vida si alguien más depende de tus ingresos. Bien sea que se trate de hijos, cónyuge, padres u algún otro familiar. De hecho, tener un seguro de vida no suele estar en la lista de prioridades financieras de un ventieañero, y eso no está del todo mal.
No obstante, si tienes una familia o un matrimonio, probablemente necesites adquirir un seguro. La edad, por su parte, puede desempeñar un papel fundamental en cuanto a la decisión de comprar un seguro de vida, pero la verdad es que se trata más de el entorno en el cual estés. Un ejemplo de ello sería el siguiente:
-Si tienes 25 años, estás casado y tienes un bebé recién nacido, sí necesitas un seguro de vida.
-Si tienes 30 años y estás soltero, ni tienes hijos, desde luego no necesitas un seguro de vida.
-Si tienes 27 años, estás casado, pero tu esposa también trabaja, probablemente aún no necesiten un seguro de vida, pero es importante que se incluya dentro de la planificación financiera.
Comenzar una familia significa comprar un seguro de vida
Por lo general, se necesita un seguro de vida cuando se inicia con una familia. Siendo así, el seguro de vida no lo disfruta (en algunos casos) quien lo adquiere, sino que es para su familia en caso de que fallezca.
Aunado a ello, existen algunas situaciones especiales que pueden llegar a motivar a una persona a tomar y adquirir una póliza de vida. Un ejemplo de ello sería un padre que le ha adjudicado un préstamo estudiantil o hipotecario a su hijo. En ese caso, el hijo debería tener su póliza de vida para que pueda pagar su cuota de crédito en caso de que le ocurra algo.
El seguro de vida antes de los hijos
Si eres una persona inteligente y muy planificada a nivel financiero, puedes comenzar a proyectar las necesidades de un seguro de vida antes de tener un hijo. Un ejemplo de ello sería contratar un seguro de vida solo con un matrimonio. Muchas parejas dependen de dos ingresos para pagar los gastos mensuales, por lo que, si uno de los cónyuges fallece, el otro tendría que pagar los gastos por su cuenta.
Otro factor determinante para saber cuándo conviene comprar un seguro de vida es tener en cuenta que este tipo de seguros se vuelve más caro a medida que se envejece. Por ello, mientras más joven se contrate el seguro, mejor. De hecho, la mayoría de las aseguradoras ofrecen un mantenimiento de la prima con el transcurso de los años, e incluso ofrecen la oportunidad de utilizar los fondos de la póliza para la jubilación.
Conclusión
El seguro de vida es una parte importante en cuanto a las herramientas financieras, pero no es una herramienta que todos necesitan al mismo tiempo. Mucho depende de la edad, situación familiar y si hay personas que dependan de tus ingresos.
